Caro Diario,
pasaron días de reacomodamiento, cosa nunca fácil de obtener.
Mientras tanto mi nieto Ale se fue y vino de Malasia, por su trabajo que lo lleva a cuanto rincón del mundo lo llame. Pero Malasia es un destino impactante.
Hace un año, más o menos, mi nieto Andrés también anduvo por ahí en busca de ese espíritu oriental que nos fascina quizás por ser tan lejano a nuestra occidentalidad.
Emilio Salgari me acercaba a ese país remoto, a mis nueve años, cuando la Aventura, así con mayúscula, se vivía a través de los libros. Yo los bebía, me extraviaba en las páginas que llevaban mi fantasía a participar desde "adentro".
La intrepidez, el coraje, la mistad y los amores imposibles.
Sandokán, el pirata noble, y el incondicional Yañez desafíando al opresor. Lady Marian, la perla de Labuán, la amada, desafiándolo todo hasta morir. Éso me fascinó en la infancia y en la primera adolescencia.
Más adelante, Malasia fue envuelta en el estruendo de la guerra. De aquella se supo, cuando acallarono los boletines, nuevamente a través de la literatura, de otras atrocidades y otros heroicismos.
Pero fue bastante después que me topé de nuevo con la antigua fascinación.
Un libro, que me atrajo desde el título, en italiano, Il vento non sa leggere. Recuerdo haberlo devorado. desde el epígrafe:
"Kono hana wa/ Kataku oru-na! to/ iu tate fuda mo,/ Yomenu Kaze ni wa/ Zehi mo nashi". Poema japonés
"En el cartel está escrito: No arruines estas flores" / Mas para el viento es inútil/ porque no sabe leer"
Un diario de guerra. Un amor que no sabe de enemigos. El teniente Michael Quinn, inglés, herido en cuerpo y alma, encuentra en el hospital a Sabby, hermosa, dulce y japonesa.
La lucha, la jungla quedaron atrás. Sólo el eterno y húmedo verde queda en las retinas y pegado a la piel como una pesadilla que el asombro de descubrir una cama con sábanas blancas y frescas, no logra disipar.
Sólo el amor salva.
Sabby: - ¿Tú crees que sea una cosa linda estar enamorados?
Michael: - Ha sido la cosa más linda y más paradisíaca que me ha sucedido...¿y para tí?
Sabby: - Amor, ha sido como dormirse de a poco y deslizar en un sueño delicioso. Ha sido casi como no vivir.
Michael: - Yo creo que vivir sea ésto. Y que todo el resto sea como estar muertos.
Ella tenía el perfume de las flores. De todas las flores.
....No creia que estuviese por morir. Pensaba a los labios de Sabby, tibios, suaves y apasionados sobre los míos, a sus manos vivaces. Sabby era cálida y viva y yo la amaba. Sabby no podía morir. Y dándome cuenta de ésto, una nueva alegría surgió en mí como una profusión de flores que florece de golpe desde el tronco oscuro de un cactus.
Me sentí lleno de vida, de un amor exuberante ...
Mas el viento no sabe leer.
De nuevo la intrepidez, la amistad, lo heroico y el amor en esta novela de Richard Mason.
¿De cuántas páginas leídas están hechos nuestros deseos de conocer más allá de nuestra vereda?
El mayor de mis nietos descubrió un mundo moderno, empresarial, rico y tremendamente civilizado aunque pegado a esa jungla que él miraba desde la terraza de un hotel de lujo.
De ahí mi curiosidad por conocer Kuala Lumpur y las torres Petronas.
Andrés fue más a la esencia, al pueblo en bicicleta, a la comida en la calle y a la jungla en ojotas a lomo de elefante.
¿Quedará todo aquello tán lejos de mí?
La respuesta por ahora es una duda. ¿Sabrá el tiempotransformarla en certeza?
Me fui lejos, caro diario y me gustó. Pero a las 2 a.m. es hora de ir a dormir.
La foto para cuando vuelva...
jueves, 19 de agosto de 2010
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ResponderEliminarSiempre es un inmenso placer leerla y descubrir a través de sus palabras lugares aún desconocidos.
ResponderEliminarCariños.
Gracias!!!
ResponderEliminarQue lindo encontrar tu comentario, al despertar.
Y para colmo ¡entró dos veces!
Veremos si llegamos a Malasia o me pasará como a Salgari que no salió nunca del Mediterraneo jaja
Un beso y nuevamente gracias por leer ¡tan temprano!
ahh! mami... Malasia.. que lindo, cómo me atraen esos lugares, quizás, como decís , sea por lo misterioso y lejano, pero siempre tienen un imán increible... quizás por lo que nos dejaron esos libros.. románticos y audaces..
ResponderEliminarviví como propio el camino que anduvieron mis chicos por esos lados...
que te parece si nos hacemos nuestro camino juntas...?? seguro q tu mimijo se engancha... no se.. quizás sea solo un sueño.. pero como no cuesta nada..me gusta la idea de soñarlo
besosssssssss
A veces de tanto soñar algo, se hace realidad!
ResponderEliminarAndá preparando a mimijo!
Beso, 'ma